1. Comprender que el estudio del pasado constituye un condicionante imprescindible para la explicación y el entendimiento del presente, y proporciona la mejor disposición posible para afrontar el futuro.
2. Conocer la realidad política, económica, social y cultural de las épocas pasadas gracias a un método histórico-crítico comparativo.
3. Conocer y comprender los procesos de cambio político, social, económico y cultural en la sociedad de una determinada época.
4. Desarrollar la capacidad de identificar, organizar y analizar información relevante de forma autónoma, crítica y sistemática sobre fuentes primarias y secundarias.
5. Desarrollar la capacidad de debatir y formular razonamientos críticos.
6. Desarrollar la capacidad de argumentar científica e históricamente una postura cultural frente a las problemáticas del pasado.