La estrategia de adquisición está basada sobre la observación, la reflexión, la sistematización y después, la producción. Cada unidad propone al alumno adquirir elementos de lengua-cultura que podrá reinvertir en producciones guiadas o libres y en tareas concretas de la vida cotidiana. Estas tareas implican al alumno en acciones de comunicación que se desarrollan en un contexto social claro y que acaban con una producción y con un resultado medible.
Nivel A2: Se adquiere cuando el estudiante es capaz de comprender frases y expresiones de uso frecuente relacionadas con áreas de experiencia que le son especialmente relevantes (información básica sobre sí mismo y su familia, compras, lugares de interés, ocupaciones, etc.); cuando sabe comunicarse a la hora de llevar a cabo tareas simples y cotidianas que no requieran más que intercambios sencillos y directos de información sobre cuestiones que le son conocidas o habituales y cuando sabe describir en términos sencillos aspectos de su pasado y su entorno así como cuestiones relacionadas con sus necesidades inmediatas.